A lo largo de nuestra vida, hemos herido a mucha gente, sea a tu pareja, amigos, familiares o conocidos y a medida que pasa el tiempo nos damos cuenta de la necesidad de pedir perdón o perdonar. Si te han herido, sientes un gran dolor, lo que te provoca con el tiempo rencores, odio y deseo de venganza, lo que no te permite tener paz, porque estás pensando en lo mismo. Necesitas perdonar, aunque tu subconsciente te diga que no, es necesario olvidar y más aún si la persona que te ha hecho daño, no te lo pide, debes eliminar este resentimiento porque es una carga muy pesada para ti.
Por esa razón si no te piden perdón, perdónalo, así conseguirás vivir en felicidad, hazlo por tu bienestar.
Todos ofendemos a alguien, por eso debemos tener valentía y reconocer nuestros errores y pedir perdón, así reparamos el daño que hemos ocasionado, este perdón debe ser sincero para evitar enfermarnos físicamente y mentalmente, ya que emocionalmente nos deprime y espiritualmente no avanzamos. Si has ocasionado daño a alguien, búscalo y sé sincero, muéstrale tu arrepentimiento, así te liberas del sentimiento de culpa. Porque lo más importante para ti, es tener serenidad, no vivir alterado ya que puede repercutir en nuestras relaciones personales.
El ser humano comete errores y muchos, esto quiere decir que hemos cometidos errores y debemos de reconocer esos errores.
Una vez que reconocemos nuestra equivocación, surge después el sentimiento de culpabilidad. Esto hace que aceptemos que hemos obrado mal, con las personas que has herido o lastimado. Debes ponerte en su lugar y sentir la verdad del dolor que has provocado en la otra persona. Cuando pides perdón de corazón, te sentirás muy feliz, porque has demostrado que estas en crecimiento emocional y en lo futuro trata de no lastimar a nadie.
Y si vas a perdonar, hazlo con sinceridad porque se produce una verdadera transformación en nuestra vida interior, dejando atrás las cosas malas como odio, venganza, indiferencias. El perdonar y pedir perdón nos trae beneficios a nuestra vida.
