Las plantas son organismos autótrofos, es decir, que producen su propio alimento para sobrevivir, lo hacen a partir de la captación de rayos solares a través de la clorofila de los cloroplastos, de la absorción de agua a través de las raíces y de la captación del dióxido de carbono a través de los estomas (pequeños orificios que se abren y se cierran, presentes en el envés de las hojas).

Sin embargo, existen plantas que también pueden alimentarse de otros seres vivos, a las cuales se les llama plantas carnívoras. Hay gran variedad de especies carnívoras, pero la más conocida es la planta de nombre común venus atrapamoscas, su nombre científico es Dionaea muscipula, atrapa a sus presas vivas, principalmente arácnidos e insectos.

¿Cómo atrapa y mata a sus presas?

Aunque las plantas no tienen sistema nervioso y muscular como los animales, la venus atrapamoscas puede percibir, atrapar y comer a su presa además de realizar la fotosíntesis. Esta depredadora puede crecer en suelos inhóspitos y pobres en nutrientes, gracias a su anatomía podemos comprender mejor cómo ingeniosamente consigue más alimento.

Su estructura cuenta con dos hojas o lóbulos, que se abren y se cierran, son una trampa que cuenta con néctar para atraer y seducir a sus víctimas. Los insectos pueden quedar atrapados en menos de un segundo.

Cada lóbulo en su interior tiene vellos que detectan el movimiento, cuando un insecto los toca se envía una carga eléctrica a la vena central provocando un cambio brusco de presión y un cierre rápido de los lóbulos.

Asimismo, cada lóbulo tiene a su alrededor una hilera de cilios o espinas largas y delgadas que evitan el escape de sus víctimas.

Finalmente, "la planta secreta enzimas digestivas a través de glándulas que disuelven al insecto, haciendo que libere carbono y nitrógeno nutritivos, con los cuales se alimenta. Una semana después, la trampa vuelve a su posición original, dejando al descubierto los restos del insecto".

Datos muy interesantes

1. "El nombre de venus atrapamoscas hace alusión a la diosa romana del amor".

2. Es una de las plantas carnívoras más cultivada en todo el mundo.

3. Cada primavera brotan tallos de éstas, dando lugar a unas flores blancas preciosas para que se alimenten los polinizadores y así continuar con la perpetuación de esta especie.

4. La planta se puede mover o cerrar por el cambio en la presión del agua de las paredes de las células de la hoja.

5. Existen más de 625 especies de plantas carnívoras en el mundo.

6. La primera descripción de plantas carnívoras la hizo Charles Darwin en 1875.

7. Algunas plantas carnívoras pueden tener propiedades anti-fúngicas que pueden ser utilizadas con propósitos medicinales.

La naturaleza es sorprendente, y si de sobrevivir se trata, nuestro mejor aliado son las adaptaciones que nos han permitido permanecer en la Tierra.