Finanzas

Parte de la economía encargada en estudiar cómo se consigue y administra el dinero

Según la definición de la Real Academia Española la palabra "finanza" deriva del vocablo francés "financé" y se relaciona con la obligación que un sujeto afronta para solventar el adeudo de alguien más. La noción también está vinculada con la hacienda pública, caudales y bienes. No obstante, en el entorno cotidiano, las finanzas son el análisis de las dinámicas del dinero, al circular entre las personas, firmas o gobiernos.

De esta manera, las finanzas se perfilan como una parte de la economía y se enfoca en estudiar cómo se consiguen y administran los capitales. En última instancia, las finanzas se ocupan de la gestión de los fondos. Ahora bien, las finanzas se ocupan de la gestión de los fondos: se relacionan, básicamente, con los que precisa una familia para solventar sus necesidades básicas. La persona ocupada de sus finanzas particulares, deberá establecer cómo conseguirá esos recursos y los protegerá ante imprevistos variados, como sería el caso de una situación de desempleo.

Otros aprovechamientos de las finanzas personales, tienen que ver con la práctica del ahorro, el gasto que se realice en un cierto periodo y la inversión que pueda desarrollarse. En este último campo de las finanzas, aparecen especialistas dedicados a la búsqueda de opciones, siempre orientadas al beneficio de los individuos, para invertir capitales. El objetivo de estos movimientos financieros es alcanzar siempre que sea posible, un positivo balance.

Pero también existen las finanzas corporativas, mismas que se concentran en las maneras que tienen las firmas para producir valor a través de la utilización de recursos económicos. Algunos de los conceptos esenciales que se manejan en el ámbito de las finanzas corporativas son los de la inversión, obtención de beneficios y financiación.

Finalmente tenemos a las finanzas públicas, las cuales están vinculadas con la política fiscal que maneja un gobierno. Este último consigue recursos al cobrar impuestos a los ciudadanos. Ese capital el Estado lo invierte a través del gasto público para beneficio de la sociedad.