El humano es un organismo que en el 43 por ciento consta de células. El 57 por ciento restante son células bacterianas. Y para mantenerlo sano uno de los métodos es asegurarse de que la dieta no carezca de productos lácteos fermentados como: kéfir, suero de leche y yogur. Esto afecta en gran medida la condición de nuestro microbioma, dicen los científicos. Una flora bacteriana sana es una persona más sana.
Las personas que comen yogur suelen tener:
- Menos kilos
- Mejor inmunidad
- Presión más baja
- Menor riesgo de diabetes
- Mejor humor
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