A muchos nos ocurre que cuando nuestro gato da muestras de sentirse mal, corremos a la clínica veterinaria que conocemos o a la más cercana y damos por hecho que el doctor que nos atenderá sabe de gatos y lo sacará del problema. Sin embargo, por experiencia propia lo sé, no en todos los casos esta es la mejor la opción.

La mayoría de los médicos veterinarios, aunque sí estudian a los animales en general, conocen más de enfermedades y tratamientos para perros que para gatos, y no es que les importen más o sea cuestión de gusto, sino que hay mucha más gente que lleva a sus perros a consulta.

La doctora Alejandra, de Centro Veterinario Felino, nos comentaba que hay tantas personas que tienen gatos, como aquellas que tienen perros, pero que los dueños de gatos no es común que los lleven al médico. Dice que esto se debe a que como los gatos son más independientes y dignos (se pasean solos, hacen sus necesidades fuera, se ocultan cuando se sienten mal e incluso huyen para morir lejos de casa) no es fácil darse cuenta de que traen algún problema de vómito, heces flojas u otras complicaciones.

Además, en México poca gente baña a sus gatos o les corta las uñas, por lo que las visitas a los centros veterinarios son aún menos comunes. Así, el expertise de los médicos crece en perros, y aunque hagan su mejor esfuerzo, resulta que ante un mismo mal son capaces de salvar al can, pero se les va el felino.

Señales de que quizá tu médico veterinario no sabe tanto de gatos

Si tu gato se puso mal y al correr al médico lo oyes decir cosas como estas:

"Es que los gatos son así, si no quieren comer no se puede hacer nada”.

“En perros la obstrucción urinaria es muy común, y se da por el consumo de comida comercial de la que venden en el súper, ninguna marca es buena.

Hay que operar de inmediato”.

“Es que en perros es fácil la cirujía, porque sus conductos son más grandes, pero en gatos suele ser fatal”.

¡Atención! agradécele y ve a buscar otra opinión.

El médico del que oí estas frases fue durante más de 15 años el veterinario de todas mis MASCOTAS y la confianza que siempre tuvimos en él era total, tanta que a pesar de que una de mis gatitas acababa de morir en su consultorio hacia tres meses, cuando el gato macho se puso mal por una obstrucción urinaria, corrimos con él.

Afortunadamente y en la desesperación de salvar al bello peludo, rey y señor de nuestra humilde casa, ante el panorama que nos pintaba buscamos otra opinión. Así, fue que llegamos al Centro Veterinario Felino donde lo dicho por las doctoras Luisa Bunt y Alejandra Pardo, fue muy diferente:

“Lo más importante es que coma y esté hidratado. El daño renal por no comer en gatos se da muy rápido, por lo que si no quiere comer, hay que obligarlo. Le pondremos suero para que se mantenga hidratado, y le daremos papillas con una jeringa”

“En gatos también es muy común la obstrucción urinaria, aquí nos llegan de 7 a 8 casos al mes. Sí se da por el consumo de comida comercial, pero hay marcas mejores que otras y no es ley que ocurra, depende del gato.

La cirujía es nuestro último recurso, primero hay que intentar disolver las arenas con medicamento”.

“Como el médico anterior operó, esta nueva cirujía es sumamente delicada y preferimos no hacerla aquí porque el gatito ya ha pasado por muchas cosas y es de alto riesgo, pero hay expertos en México como el doctor Jesús Paredes, experto en Cirugía de Tejidos Blandos, Ortopedia y Neurología, que es lo más recomendable que hay; fue nuestro maestro en la UNAM y confiamos plenamente en él”

Así, el gato, después de haber sido desahuciado a sus apenas 8 años de edad (tras 4 meses de cirujías y tratamientos) quedó salvado y feliz, esperemos que por mucho tiempo más.

La lección aquí es que depende de para qué necesites al veterinario.

Cuando se trata de ponerles las vacunas, curar alguna herida, hacer revisión de control, comprarles artículos para su confort o entretenimiento, cualquier clínica veterinaria que conozcas o te hayan recomendado servirá, pero si tu gato se enfermó de algo un poco más grave, mejor busca a los médicos especializados.

Opciones de clínicas donde sí saben de gatos en Ciudad de México

Centro Veterinario Felino (MV Luisa Bunt y MV Alejandra Pardo).

Clínica exclusiva para gatos. Abren de martes a sábado de 10:30 a.m. - 6:30 p.m Teléfono del consultorio: 63886015 Dirección: Cerro de las campanas 13, Coyoacán, Distrito Federal, México 04200.

Centro Médico para Gatos

Centro veterinario exclusivo para gatos.

Abierto de lunes a sábado de 9 a 19 hrs y Domingo de 9 a 15 hrs. Teléfono: 6363 9935.

Dirección: Avenida Coyoacán 616, colonia Del Valle, ciudad México, D.F., municipio o delegación Benito Juárez, c.p. 03100.

Centro Veterinario México (MV Jesús Paredes Pérez)

Hospital veterinario. Abierto las 24 horas. Atienden todo tipo de animales domésticos: perros, gatos, conejos, hurones, etc. Teléfono: 5598 7802

Dirección: Cincinnati No.22 Col. Ciudad de los Deportes, Delegación Benito Juárez, México D.F.