Se dice que cuando Pachita falleció su cuerpo permaneció emitiendo calor durante 3 días, fue hasta entonces cuando un doctor pudo constatar el certificado de su muerte. Ya había sido salvada en otras ocasiones según relataba el hermanito Cuauhtémoc, el espíritu que entraba en el cuerpo de Pachita en el momento de las curaciones. Era efectivamente el Cuauhtémoc, el último emperador azteca, quién ahora como un ser de luz y por medio de la voluntad de Dios, curaba, operaba y realizaba transplante de órganos con un sólo cuchillo sin filo.

Barbara Guerrero, mejor conocida como Pachita, era originaria de Parral, Chihuahua.

Al quedarse huérfana, fue adoptada por un personaje descendiente de africano, llamado Charles, quién le enseñó el uso de las hierbas medicinales. Ella misma contaba que vivió una vida un tanto escandalosa y difícil; desde vender billetes de lotería, hasta enlistarse en las filas de Pancho Villa.

Muchas personas fueron los que estuvieron como ayudantes durante sus curaciones, entre ellos: Carlos Castaneda, Alejandro Jodorowsky y Jacobo Grinberg, entre los más conocidos. Cada uno relatando su propia versión de los hechos, de acuerdo a su propio nivel de conciencia. Entre sus otros ayudantes también llegaron a estar sus hijos Guillermo y Enrique Ugalde Guerrero.

Se esperaba que Guillermo recibiera fuera el siguiente en recibir al hermanito, como le decían de cariño, pero no fue así.

Guillermo había estado muchas de las operaciones de su madre, pero el Don le fue concedido a su hermano Enrique.

Enrique Ugalde, el "Hermanito"

El mismo Enrique relata en un documental realizado por una cineasta francesa, sobre el hermanito, que cuando supo que había recibido el Don, fue cuando vio las manos de su madre en sus propias manos.

Guillermo no le creía, pero al final tuvo la visión de su madre y aceptó que su hermano poseía ahora los poderes de curación de su madre Pachita.

Y tal cual como su madre, Enrique el nuevo hermanito realizó curaciones en diversas locaciones, entre ellas, en una residencia localizada en coyoacán, hasta su muerte en el 2012 de un paro respiratorio.

Durante este tiempo contó con nuevos ayudantes, entre ellos Domingo Ferrer, un español exiliado en México, que cuenta en el mismo documental francés como fue curado por el hermanito de un cáncer testicular. Y que además sirvió como enlace para la realización del documental mismo, como traductor.

Disputas familiares por la herencia del hermanito

Tristemente como si fuera una herencia material, algunos de los descendientes de Pachita comenzaron a pelearse el ser poseedores del espíritu de Cuauhtémoc. Por un lado está Isaias Ugalde, hijo de Guillermo, quién comenzó a relatar que el espíritu debía descender ahora en una mujer. Y en esta caso era su hermana: Liliana Ugalde. De inmediato la familia comenzó una pelea que llegó a manifestarse hasta en un blog de dictado a Jacobo Grinberg, entre otros medios.

Sacando sus ropitas al sol sobre supuestos fraudes.

Y al final se terminó aceptando hasta por el mismo Alejandro Jodorowsky que el legítimo heredero del hermanito era el hijo de Enrique: Israel Ugalde, quién junto la ayuda y asesoría de Domingo Ferrer realizan sus operaciones, ahora en la colonia San Rafael, los miércoles y viernes a partir de las 8 de la noche.

Israel Ugalde Bautista y Domingo Ferrer Vivo ¿un fraude?

Debo admitir que cuando visité al hermanito quedé un poco decepcionada, ya antes la persona quién me recomendó me advirtió que Israel no había podido curar a su hermana de un cáncer, solamente lograron quitarle el dolor en base a un tratamiento con hierbas; pero aún así mantuve la fe de que podrían hacer algo al respecto, y al menos darme algún diagnóstico.

El primer donativo que se da es de 300 pesos y después de una larga espera, me sorprendió que no hubiese tanta gente, relataban que en la época de Pachita llegaba mucha gente de todas partes de México y del mundo, y sus operaciones terminaban a altas horas de la madrugada. Posiblemente sea la dificultad de conseguir a una persona que te recomienda, o el hecho de que como se han cambiado de casas no es fácil seguirles la pista.

En fin, algunas de las diferencias que noté en base a los relatos de Grinberg, quién en lo personal creo que fue la única persona quién realmente supo relatar en un nivel de conciencia mayor lo que sucedía en aquellas curaciones. En primer lugar el orden en como aceptan las atenciones: Grinberg relata que atendía en primer orden a niños y mujeres y hasta último lugar a los hombres.

Ahora Domingo Ferrer instruía que por cuestión de energía pasarían en primer lugar los niños y hombres y posteriormente las niñas y mujeres. Después que luego de escribir en una hoja los datos y el padecimiento se pasaría de preferencia a solas con el hermanito donde se le saludaría y se le explicaría el favor que necesitamos, para después irnos, sin necesidad de que nos diera más detalles, ni de que hiciera un diagnóstico ese mismo día. Sino hasta el día siguiente volver a visitarlos para obtener el resultado y tratamiento.

Por lo general recetan un tratamiento en base a hierbas y licor, pero si desafortunadamente se requiere de una cirugía, estas personas llegan a cobrar hasta 50 mil pesos.

Evidentemente como donativo para las necesidades que requiere el médium, argumentan. ¿Tan siquiera realizan un estudio para saber si la persona tiene los recursos financieros para solventarlo? obvio no. En mi opinión supieron hacer su agosto manchando una noble tradición, pero se los dejo a su consideración.